Tras la pérdida del reino en día del desembarco y embajada mora, las tropas cristianas recuperaron la llave del castillo. El acto de reconquista se inició con la batalla de arcabucería entre el bando moro y cristiano, ambas tropas representaron la lucha entre la cruz y la media luna en la Playa de la Grava.
Posteriormente, los embajadores moro y cristiano dialogaron a las puertas de castillo y tuvo lugar un espectáculo de lucha y fuego donde los cristianos volvían a recuperar su fortaleza. El acto de la reconquista fue seguido por miles de personas que no quisieron perderse esta recreación histórica y se acercaron hasta la playa y la avenida Jaime I para vivir las fiestas de Moros y Cristianos de Xàbia.
Recuperado el reino y volviendo a Xàbia a ser cristiana, los miembros de las filaes desfilaron alrededor de castillo al paso de sus marchas moras y cristianas.